Si Otegi reincide… a la cárcel
El juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, deberá estar muy atento a todo lo que ocurra en el País Vasco a partir de la semana que viene. La salida de Arnaldo Otegi de la cárcel de Logroño el próximo martes supondrá el inicio de una concatenación de actos en homenaje a la figura del dirigente etarra que culminarán el 5 de marzo con una reunión masiva en el velódromo de Anoeta. La Fiscalía de la Audiencia Nacional está sobre aviso al respecto de lo que puede suceder en estas jornadas de exaltación abertzale. Si en algún momento Otegi excede las normas democráticas y enaltece de manera explícita o implícita el terrorismo, el Estado tiene que actuar con contundencia y devolverlo al presidio.
Ante la petición de prohibir todos los actos que ha efectuado el delegado del Gobierno en Euskadi, Carlos Urquijo, la Fiscalía ha reaccionado aumentando la vigilancia. Si bien la libertad de expresión está recogida en el artículo 20 de la Constitución y el derecho de reunión en el 21, decir Otegi es decir terror, retrotraernos a algunos de los peores capítulos de nuestra democracia, nombrar a una persona que odia a España y desprecia su Carta Magna. Por ello, toda precaución será poca y el despliegue especial de Policía y Guardia Civil para supervisar el transcurrir de los actos resulta imprescindible. Ante cualquier desmán del entorno de ETA, el Estado debe mostrarse inflexible y proteger la dignidad de todos los españoles.
Uno de los colectivos más afectados por la puesta en libertad de Otegi es la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) quien ha pedido también al juez Velasco que prohiba unas celebraciones que, organizadas por los proetarras de Sortu, pretenden presentar a Otegi como un hombre de paz, algo opuesto a la realidad si atendemos a su currículo, donde figuran hechos como el secuestro del político Javier Rupérez en 1979 en el que tomó parte, a pesar de salir absuelto por falta de pruebas materiales, como certificó otra de las participantes, la francesa Françoise Marhuenda. Un hombre que fue condenado a 10 años de cárcel el pasado 16 de septiembre de 2011 y que sale ahora después de que el Tribunal Supremo le redujera seis años y medio de la misma en 2012. El etarra recibirá honores de héroe en Elgoibar y San Sebastián, ambos lugares gobernados por el PNV, que facilitará la organización de un acto en la plaza de su ciudad natal y en el velódromo de Anoeta de la capital de Guipúzcoa.
La elección del complejo deportivo de Anoeta no es ninguna casualidad ya que es una especie de templo simbólico dentro de la izquierda radical vasca desde los tiempos de Batasuna. Una manera de demostrar músculo ideológico si consiguen llenar un escenario donde se llegaron a reunir más de 14.000 proetarras. La maquinaria de propaganda funciona ya a pleno rendimiento y han repartido carteles promocionales por los lugares donde estará Otegi. Tanto es así que incluso los vecinos han alertado a la Policía del alto contenido político de los mismos. El desafío de la Audiencia Nacional a partir de la semana que viene es garantizar que la dignidad de España y de los españoles se mantiene intacta, así como salvaguardar la memoria de todos aquellos que pagaron con su vida la barbarie de los asesinos de ETA.